Fotografía de pixiq.xom
Practicar con pasteles de boda es un buen entrenamiento previo para poder capturar adecuadamente vestidos de novia y cualquier otro tema que incluya elementos muy oscuros y muy claros dentro de la misma imagen. Aquí os mostramos un análisis que el sitio pixiq.com ha hecho para el sacarle el jugo a una toma hecha en circunstancias difíciles.
En ella existen tres problemas:
Primero, la iluminación es suave, pero la mesa está colocada contra una pared, lo cual hace que el flash direccional no pueda lograr un mejor detalle, del glaseado. Habría sombras enormes y poco sentadoras sin importar lo que se haga.
Segundo, las flores elegidas son extremadamente oscuras en comparación con el blanco en el pastel. Los colores profundos tienden a lucir irreales y demasiado saturados, por lo que las novias suelen preferir tonos más acotados.
En tercer lugar, la exposición automática hará que el pastel blanco salga gris. Utiliza exposición manual para que se capturen correctamente los tonos blancos, lo que significa dejar ingresar más luz, no cerrar la abertura.
A continuación, veremos cómo proceder para solucionar estos inconvenientes:
Logra una buena exposición para el blanco primero. Si el este se sobre-expone, nuestros ojos no van a tolerar la falla. Por el contrario, es menos preocupante si las áreas oscuras son demasiado oscuras - nada nuevo aquí, es tan sólo el modo como funcionan nuestros ojos.
Buscaremos entonces, una exposición que mantenga la torta blanca, pero manteniendo el detalle del glaseado. Esto se logrará sumando aproximadamente dos ƒ / stops a lo que indica exposición automática (ƒ / 4, en lugar de ƒ / 8, por ejemplo). El resultado es bueno, pero mira lo que pasa con las flores - colores oscuros y fangosos.
En la próxima parte, veremos cómo solucionar este y otros problemas durante la edición.
Referencias:
http://www.pixiq.com/article/hdr-photo-technique-at-a-wedding
