El resultado final - del sitio pixiq.com
Pasemos ahora a la parte de la postproducción. Hay dos técnicas fáciles de HDR que pueden salvar el día. Para ambas fusionarás dos imágenes, una para el pastel y otra para las flores, y corregirás el exceso de saturación en el camino.
El primer paso, ya sea que utilices la técnica HDR en forma automática o que hagas una capa con máscara a mano, será crear una imagen duplicada que favorezca a las flores. Aquí es donde el truco de abrir un archivo JPEG en un convertidor RAW funciona de maravillas y es muy simple. Para ello…
- Establece como preferencia abrir JPEG en Camera RAW.
- Duplica la imagen bien expuesta para que se distinga el glaseado.
- Abre el duplicado en Camera RAW y ajusta los deslizadores para favorecer las flores oscuras.
El resultado son dos imágenes, una para los tonos brillantes, otra para las sombras. Aquí se usó una mayor exposición, más luz de relleno y una menor saturación para neutralizar la manera como la digitalización tiende a saturar los rojos.
Segundo paso
Panel de ajustes de HDR automático
TÉCNICA 2: Crea las capas manualmente
La capa más clara por lo general funciona mejor en la parte superior. Pinta en las áreas oscuras una máscara negra para mostrar sólo las flores que están correctamente capturadas en la imagen clara. Evalúa visualmente el efecto del enmascaramiento - aquí se decidió reducir al 50% la opacidad. Toma un pincel pequeño y suave para hacer esto, pero cuando lo pruebes verás en realidad no hace falta ser muy preciso.
Entonces, ¿cuál de estas dos técnicas es la mejor?
La función automática de HDR dejada tal cual dio un resultado un poco aburrido y sin vida, con tintes verdosos y las flores un poco saturadas. No se ha trabajado mucho para llegar a este punto, pero ahora para solucionar estos problemas debe añadirse magenta, brillo a la imagen en general, y oscurecer y desaturar las flores con la herramienta Esponja en modo desaturar.
Las capas manuales han salido mejor. Aunque la etapa inicial tuvo más tiempo, hubo que hacer luego. El detalle de blanco sobre blanco no es tan bueno como en HDR, pero es aceptable. Las copas se mantuvieron un poco más oscuras, lo cual es bueno porque no queremos que el ojo se aparte del pastel. El color de la imagen en general tiene más calidad; y las flores se ven mucho más reales en términos de saturación y densidad.
En conclusión, cualquiera sea el método que elijas puede salir bien siempre y cuando realices los ajustes finos necesarios que harán que tu imagen luzca totalmente profesional.
Referencia:
http://www.pixiq.com/article/hdr-photo-technique-at-a-wedding